La cita del ECOSOC, que tiene lugar hoy en Ginebra, reúne a más de 300 embajadores ante las Naciones Unidas y representantes de organismos internacionales
El Director General de Acción contra el Hambre-España centrará su intervención en la situación en Sahel, donde 11,6 millones de personas están amenazados hoy por el hambre, y en la crisis siria
Madrid, 17 de julio de 2013
Más de 300 representantes de alto nivel revisan hoy en Ginebra, en el seno de un encuentro del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC) los principales retos humanitarios que la comunidad internacional debe afrontar para el segundo semestre del año.
El Director General de Acción contra el Hambre-España, Olivier Longué, liderará esta revisión junto a la sub-secretaria para Coordinación de Asuntos Humanitarios y Respuesta a Emergencia, Valérie Amos.
Longué centrará su intervención en la zona del Sahel, que califica como “el epicentro del hambre”: “incluso en un año normal como este, en el que las cosechas han sido relativamente buenas, nos encontramos a más de 11 millones de personas amenazadas por el hambre y un escenario de desnutrición aguda infantil similar al de un año de crisis, lo que refleja la extrema fragilidad alimentaria de esta región del planeta y la necesidad de respuestas a medio y largo plazo que miren más allá de la emergencia y creen resiliencia entre la población”, asegura.
“La región de Sahel sigue siendo el epicentro del hambre. Los países que la conforman están en el pelotón de cola de la lista de Desarrollo Humano y la población vive en un continuo equilibrio que les puede hacer caer del lado de la crisis aguda al menor incidente político, socioeconómico o meteorológico”, explica el Director General de Acción contra el Hambre, Olivier Longué.
En este sentido Longué pretende mantener el impulso de movilización, tanto de gobiernos de la región como de donantes, logrado en la crisis de 2012, año en el que se logró una respuesta humanitaria sin precedentes en la zona: “las soluciones hoy, más que nunca, están a nuestros alcance y es crucial mantener el esfuerzo logrado en las emergencias para lograr alejar la sombra del hambre en el largo plazo”. Proyectos como sistemas de regadío con paneles solares, seguimiento de la biomasa y pastos disponibles con imágenes satelitales y promoción de cuidados nutricionales básicos se han revelado como tres experiencias exitosas que han logrado erradicar completamente la desnutrición en las comunidades en las que se han aplicado.
Crisis siria, la mayor emergencia humanitaria
Longué alertará también de las consecuencias humanitarias del conflicto sirio, que ya ha provocado más de 4 millones de desplazamientos y la existencia de casi 7 millones de personas en situación sin cubrir sus necesidades básicas, y que se afianza por momentos como una de las emergencia humanitaria más importantes de los últimos años.
Para Acción contra el Hambre en particular y para la comunidad humanitaria en general, “es muy positivo que el sistema de las Naciones Unidas se apoye en organizaciones como la nuestra a la hora de marcar las prioridades humanitarias, ya que pone en valor nuestra experiencia directa en el terreno y asegura que estas prioridades están en línea con las necesidades reales de la población”, ha asegurado el Director de Operaciones de Acción contra el Hambre, Vincent Stehli.
Acción contra el Hambre es una organización humanitaria internacional e independiente que combate la desnutrición infantil a la vez que garantiza agua y medios de vida seguros a las poblaciones más vulnerables. Intervenimos en más de 45 países apoyando a más de siete millones de personas. Nuestra visión es un mundo sin desnutrición; nuestro primer objetivo, devolver la dignidad a quienes hoy viven amenazados por el hambre.
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